Islas Atlánticas

Destinos Desconocidos

Las Islas Azores, Madeira, Santo Tomé y Príncipe y el Archipiélago de Cabo Verde, situadas en medio del Océano Atlántico, constituyen unos destinos desconocidos.

Situado en pleno Océano Atlántico, a medio camino entre Europa y América, a unos 1.500 Km. de Portugal, es un archipiélago volcánico formado por nueve islas, que se dividen en tres grupos: Oriental (Sao Miguel y Santa María), Central (Pico, Faial, Terceira, Graciosa y Sao Jorge) y Occidental (Flores y Corvo), siendo las principales San Miguel donde se encuentra la capital, Punta Delgada, Pico y Terceira.

Este archipiélago, conocido ya por cartagineses, normandos y árabes, no fué colonizado hasta el Siglo XV en que los portugueses se instalaron en Santa María y San Miguel (1432). Por su situación estratégica, constituían una importante escala en la ruta marítima de América.

Las Islas Azores, una naturaleza virgen salpicada de impresionantes lagos como el de Sete Cidades, poblaciones que mantienen toda su tradición como Horta o Angra Do Heroismo, rincones tranquilos y solitarios, pequeñas calas, playas naturales...

• San Miguel: la más grande de todo el archipiélago. Isla montañosa con dos macizos volcánicos separados por una cadena de conos basálticos. El Pico da Vara con 1.150 metros de altitud, punto culminante de la isla, forma la parte final del macizo del Este, mientras que el Pico da Cruz de 850 metros, es el más alto del macizo oriental. En el centro de la isla se eleva la Serra da Agua de Pau que alcanza una altura de 940 metros.

La Laguna de Fuego, Lagoa do Fogo es un lago de cráter en el volcán de  Agua de Pau, en el centro de la isla de São Miguel. Se trata de la segunda mayor laguna de la isla, y también la más alta.

• San Miguel:
  • Ermita de la Madre de Dios del Siglo XX que sustituyó a un templo más antiguo del Siglo XVI, en la ciudad de São Miguel.
    

• Agua de Pau: en el municipio de Lagoa.
  
  
  Ermida Nossa Senhora Do Monte

• Caldeira Velha, enclavada junto a la localidad de Ribeira Grande de la Isla de San Miguel, es un espacio natural clasificado como monumento regional de las Islas Azores. Este maravilloso lugar ofrece una vegetación exótica muy variada, que va desde auténticos bosques de laurisilva, hasta líquenes que bordean las orillas de los riachuelos. Cuenta además con la piscina natural de aguas termales (a unos 37ºC), alimentada por una hermosa cascada.
  

• Ponta Delgada, capital de la región autónoma de las Azores desde 1546, conserva un tranquilo centro histórico de callejuelas con iglesias, conventos y casas solariegas. Destacan la Iglesia de Sao Sebastiao, del Siglo XVI y la capilla barroca de Santa Ana.
  Otros lugares de interés: la Caldeira de Sete Cidades, un pueblo con dos lagunas en el interior de un cráter volcánico, Lagoa do Fogo, Ribeira Grande, el Valle das Furnas, exótico jardín en el fondo de un amplio cráter. El paisaje de Las Furnas se caracteriza por las fumarolas, fuentes termales y pozas de barro hirviente.
  
  La Lagoa das Furnas se encuentra en la localidad de Furnas, al Sur de la isla de São Miguel.

• El islote de Vila Franca es un fenómeno singular frente al litoral Sur de la isla de São Miguel.
  
  

• Sete Cidades: es una de las auténticas joyas del archipiélago de las Azores. Este magnífico pueblo, localizado a orillas del Lago Azul, en el fondo de un cráter volcánico emplazado en el Oeste de la Isla de San Miguel.
  

• Vila Franca do Campo: Fué la primera villa, y la capital de la isla de San Miguel, hasta que sucumbió con el terremoto de 1522 y la erupción en la Lagoa do Fogo de 1563. Una pintoresca localidad frente al afamado Ilhéu da Vila Franca do Campo, la caldera de un pequeño volcán que es utilizada como piscina.
  • En la cima de la colina de Nossa Senhora da Paz, destaca la asombrosa escalinata de la capilla de Nuestra Señora de la Paz. El templo fué construído en 1522 y reconstruído en 1764.
    

• Santa María: situada más al Sur, posee hermosas playas y un paisaje bucólico.

• Terceira: Su nombre hace referencia a que fué la tercera isla del archipiélago en ser descubierta, después de la isla de Santa María y la de San Miguel. Ssu punto culmiante se encuentra a 1.022 msnm en la Sierra de Santa Bárbara, en la zona Oeste. Es una de las más bonitas del archipiélago, la tercera más grande y la segunda en importancia.
Hasta 1640, Terceira, entonces bajo dominio español, sirvió como punto de parada para los galeones cargados de oro de vuelta de las Américas.
Su capital, Angra do Heroismo, declarada Patrimonio de la Humanidad, fué capital del Archipiélago hasta 1832. Son de visita obligada la bella ciudad de Praia da Vitoria y el lago volcánico en Caldeira de Guilherme Moniz, de 15 Km. de diámetro.

• Pico: posee el punto más alto con 2.351 metros de altitud. A lo largo de la costa se alinean las poblaciones de Lajes, San Roque y Madalena, cuyas casas están construídas con bloques de lava negra.

• Faial: La quinta en importancia, está dominada por un gran cráter de unos 2 Km. de diámetro y 400 metros de profundidad conocido como la Caldeira, de suaves laderas. Su punto más alto es el Cabeço Gordo de 1.043 metros, un volcán apagado desde 1672. El principal atractivo de la isla es Horta, su capital, situada en la costa Sureste, una encantadora localidad con un rico patrimonio arquitectónico.

• Flores: Flores, prados verdosos y cascadas conforman su hermoso paisaje.

• Corvo: la más pequeña de las islas. En su centro se encuentra un amplio cráter de 300 metros de profundidad y 3.400 metros de perímetro ocupado por dos lagos salpicados por nueve islotes. Unica población, Vila Nova do Corvo, con angostas calles empedradas.

• Isla Graciosa, conocida como la Isla Blanca, es la isla más al norte de las cinco que componen el Grupo Central del archipiélago de las Azores. Principal población: Santa Cruz da Graciosa.

A mil kilómetros de distancia del Portugal continental y rodeadas por el Océano Atlántico, el archipiélago, de origen volcánico, está formado por Madeira o Madera, la mayor de las islas con un relieve muy accidentado y un interior verde y montañoso, Porto Santo, la más pequeña, un arenal de 9 kms., y por los grupos de islotes deshabitados de Desertas y Selvagens, ambos declarados reservas naturales.
Visitas principales:

• Funchal: El municipio de Funchal está compuesto por diez parroquias: Imaculado Coraçäo de María, Monte, Santa Luzía, Santa María Maior, Santo Antonio, Säo Gonçalo, Säo Martinho, Säo Pedro, Säo Roque y Sé.
  La capital de Madeira se extiende por las laderas de una amplia bahía en la costa Sur. Fundada en 1508, su nombre deriva de una hierba salvaje, el hinojo o Foeniculum Vulgare, llamada funcho en portugués, abundante en la zona al inicio de su poblamiento. Destaca el típico y colorido Barrio de Santa María con estrechas calles empedradas.
• Monte: Iglesia de Nuestra Señora do Monte, Patrona de la isla. Destaca el Jardín Tropical de Monte Palace, compuesto por múltiples especies de plantas y flores. Desde allí, bajan los típicos carros de cesto que se deslizan sobre esquís de madera, empujados por los careiros, en un recorrido único de unos 4 Km. hasta Funchal.

Costa Este: Sus paisajes van desde la aridez solitaria de Ponta de San Lorenzo en Caniçal, hasta las altas cumbres de un verde intenso de Machico y Santo da Serra.

• Machico: Aquí fué donde desembarcaron en 1419 los descubridores de la Isla de Madeira.
• Caniçal: Villa pesquera conocida en otros tiempos por la caza de la ballena cuyos vestigios se conservan en el Museo de la Ballena.
• Ponta de Sao Lourenço: Al Este de Caniçal, se caracteriza por los altos peñascos y profundos valles orientados hacia el Océano. Entre los acantilados, se halla la única playa de arena de la isla.
• Mirador de Pico do Facho: Al Norte de Machico, ofrece una espléndida vista panorámica de la zona.
• Mirador da Portela: Entre Porto da Cruz y Machico, permite observar un magnífico escenario de montañas.

La Punta de San Lorenzo, Ponta de São Lourenço: Península que conforma, junto al islote de Farol y el islote de Cevada, el extremo Este de la isla de Madeira.
Flanqueada por escarpados acantilados, desde 1996 la zona quedó protegida como reserva natural y lugar de importancia comunitaria para la conservación de algunas plantas endémicas y aves. Destaca asimismo la presencia de la foca monje.

Costa Oeste: La más solariega. La región con más historia de la isla, a donde arribaron los primeros colonizadores. Un itinerario menos popular y concurrido lleva a través de los tupidos bosques de laurisilva, Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO desde 1999, hasta donde rompen las olas al pie de escarpados acantilados.

• Cámara de Lobos: Destacan el puerto con sus coloridas barcas y la Iglesia de Sao Sebastian, adornada con azulejos.
• Curral das Freiras: Situada en un profundo valle. Desde el mirador Eira do Serrado o Nido de águila a 1.094 metros de altitud, se obtiene la mejor vista de este pueblo encajado entre montañas volcánicas.
• Ribeira da Janela: Precioso valle del Oeste de Madeira.
• Mirador de Cabo Girao: Se sitúa en un promontorio a 580 metros de altitud.

Costa Norte: El litoral Norte de Madeira se caracteriza por espectaculares paisajes verdes que se asoman sobre un mar de un azul profundo. Presenta altas montañas y profundos valles ricos en fauna y flora. La costa norte de Madeira posee las vistas más hermosas de la isla combinando los preciosos paisajes montañosos con el mar.

• Porto Moniz: En la costa de este pequeño pueblo norteño, se han creado unas piscinas naturales de agua salada entre los puntiagudos y sugerentes escollos marinos.
• Chao da Ribeira: Localidad situada en un gran valle, está rodeada por gran variedad de plantas y arbustos.
• Sao Vicente: Las casas blancas y con tejados naranjas, se agrupan en torno a la iglesia.
• Porto da Cruz, caracterizado por su imponente montaña sobre el mar, la famosa "Penha d'Águia", y por el vino local, posee una playa de arena negra, conocida por Playa da Lagoa.
• Sao Jorge: Ubicado en la costa norte de la isla de Madeira, este municipio está compuesto por seis parroquias: Arco de Säo Jorge, Faial, Ilha, Santana, Säo Jorge y Säo Roque do Faial. Ascendió a la categoría de concejo en 1835.
  Santana debe su nombre a Santa Ana, la santa patrona de la localidad. Se caracteriza por sus originales y coloridas casas triangulares de piedra cubiertas de paja.

Zona Centro

• Pico do Arieiro: Una carretera conduce hasta un mirador con vistas magníficas. Un sendero comunica el Arieiro con el Pico Ruivo, el más alto de Madeira.
• Parque das Queimadas: Senderos y pasarelas de madera, jalonados por árboles, musgos y helechos, conducen por la acequia de Caldeirao Verde hasta su cascada.
  
• Porto Santo: Conocida como la Isla Dorada debido a las tonalidades amarillo y castaño de su paisaje árido, posee una playa de nueve kilómetros de largo.

Situado en el Atlántico frente a las costas de Senegal y Mauritania. Este archipiélago de origen volcánico, compuesto por diez islas grandes y cinco menores, forma parte de la región de Macaronesia. La mayor parte de ellas son montañas escarpadas cubiertas de cenizas volcánicas. Las islas de Barlovento incluyen Santo Antao, Sao Vicente, Santa Luzía (deshabitada), Sao Nicolau, Sal y Boa Vista. Las de Sotavento incluyen Maio, Santiago, Fogo y Brava. La capital del país es Praia, en la isla de Santiago.
El nombre del archipiélago proviene de Cabo Verde, el extremo más occidental del continente africano, cerca del cual se halla la ciudad de Dakar.

Las islas estaban deshabitadas hasta que fueron descubiertas en el Siglo XV por los portugueses, quienes procedieron a colonizarlas para convertirlas en un centro de trata de esclavos. Actualmente representan la República de Cabo Verde. Principales visitas:

Isla de Santiago: Los esclavos de la Costa de Guinea fueron los primeros habitantes de Santiago.

• Serra da Malagueta: Una cordillera de origen volcánico ubicada en la parte Norte de la isla de Santiago, siendo su punto más alto 1064 metros. El Parque Natural de Serra da Malagueta, establecido el 24 de febrero de 2005, cuenta con alrededor de 124 especies de plantas y 19 especies de aves, muchas de ellas endémicas.
  
  

• Praia: La capital, encaramada sobre una meseta rocosa conocida como Plato, es uno de los municipios más antiguos de todo Cabo Verde. Se creó en el Siglo XVIII, cuando la ciudad de Santa María se convirtió en la nueva capital de Cabo Verde. Al Oeste de la ciudad se encuentran las dos playas de Praia Mar y Quebra-Canela.
• Cidade Velha (Ciudad Vieja): La primera localidad construída por los portugueses, y antigua capital de Cabo Verde, fué durante mucho tiempo el mayor mercado de esclavos del mundo. La ascensión al fuerte real de Sao Felipe ofrece unas vistas fantásticas de Cidade Velha.
• Sao Domingos: Asentado en un valle a unos 20 Km. tierra adentro.
• Tarrafal: En el extremo Norte de la isla, segunda población más extensa de la isla, es célebre por sus playas.

Isla de San Vicente: Säo Vicente (en criollo caboverdiano Sanvicente o Soncente), la segunda isla en importancia de Cabo Verde, forma parte del grupo de las Islas de Barlovento, en el Noroeste del archipiélago. El canal de Sao Vicente la separa de la isla vecina de Santo Antäo.

• Mindelo: La capital de la isla, posee pintorescas casas coloniales de dos plantas con balcones y contraventanas. Destacan: el Palacio del Gobernador, el Castillo del Siglo XVIII y su Torre de Belém.

Isla de Fogo: Los principales atractivos de esta isla-volcán del Sur de Cabo Verde, son la ascención al volcán Fogo (2.389 metros) y la visita a los cafetales de Mosteiros.

Isla de Sal: Sal cuenta con playas de arena blanca y aguas cálidas y cristalinas, y arrecifes de coral. De esta isla plana y desértica, destacan:

• Santa María: Capital administrativa y centro turístico de Sal. Situado en la punta Sur de la isla, en ella se encuentran las mejores playas.
• Pedra Lume: Situadas dentro de un cráter extinto, en esta población se hallan las mayores salinas de la isla.
• Buracona: Un paraje con piscinas naturales y grutas rodeadas de rocas volcánicas, moldeadas por la acción del agua y del viento.
• Palmeira: En la costa Oeste, es un pueblo de pescadores.

Isla de Boavista: Boavista se extiende a lo largo de una inmensa llanura desértica rodeada por aguas cristalinas de color turquesa. Es la isla más cercana al continente africano, así como la más tropical. Su clima y su paisaje están influenciados por los vientos secos y calientes del Sahara, el harmattan, una masa de aire cálido y seco. Sus dunas de arena y sus oasis forman un escenario típico del desierto que junto a sus playas írgenes de aguas cristalinas hacen de esta isla un paraíso ideal.
La isla de Boavista se ha ganado la fama de cementerio de barcos, debido a su escarpado litoral, que traicionó a cientos de navíos.

• Sal-Rei: Capital de la isla. Los edificios coloniales del centro, las ruinas de la torre de defensa del ilheu de Sal-Rei, la plaza, el puerto, el paseo marítimo y la playa constituyen el corazón de la poblacón.
• Playa de Atalanta: Situada en la Costa de Boa Esperança, al noroeste de Boavista, es un lugar tranquilo.

Perdido en el Océano Atlántico, en el Golfo de Guinea, cerca de la imaginaria línea del Ecuador, este archipiélago comprende la isla de Santo Tomé, la más grande, la isla de Príncipe y varios islotes deshabitados.
Antigua colonia portuguesa, el archipiélago, de origen volcánico, se caracteriza por su relieve accidentado, sus numerosos picos erosionados, como el Pico Sao Tomé, punto más alto de la isla con 2.024 metros, y el Pico Príncipe (948 metros). En el centro de las islas se elevan montañas de las que nacen numerosos ríos.
Cuando los portugueses desembarcaron el día de Santo Tomás en 1471, la isla grande (Santo Tomé) estaba deshabitada. Colonizado por los portugueses, pronto se convirtió en un importante mercado de esclavos negros.
Tras ser ocupado por neerlandeses y franceses (Siglos XVII-XVIII), en 1749 fué devuelto a Portugal.
Santo Tomé y Príncipe se independizó en 1975 y es democrático desde 1990.

Parque Natural de Obo: Protege todos los biotopos presentes en el archipiélago: bosques, manglares y la única sabana de Santo Tomé. Al Norte del archipiélago se encuentra la jungla, repleta de baobabs y columnas rocosas, últimos vestigios de la antigua actividad volcánica. Algunas columnas pueden alcanzar los 600 metros de altura, como la Cao Grande, pico emblemático de la isla. Cerca de Trinidade, se encuentra la cascada de Sao Nicolau.

Santo Tomé, la capital del archipiélago, es una pequeña y pintoresca ciudad que conserva el encanto anticuado de los años de colonización portuguesa. Los vetustos edificios coloniales contrastan con los parques y jardines.
Las playas más bonitas de la isla de Santo Tomé esán situadas al Sur de la capital, como por ejemplo la de Praia Piscina, Lagoa Azul, y sus numerosos baobabs, Ilheu das Cabras, Praia Pequena y Praia das Conchas. Junto a la Praia das Sete Ondas (la playa de las Siete Olas) se encuentra la cala de la Boca de Inferno.